jueves, 31 de julio de 2014

¿Cuáles son las mejores piezas publicitarias? 3ra. parte.

Lo que SÍ y lo que NO en los titulares

Algunas recomendaciones que no pretenden ser reglas inamovibles

·      Los titulares más eficaces, según el legendario creativo David Ogilvy, son los que prometen un beneficio al lector: lava más blanco, rinde más km por litro, etc. Los titulares que no contienen información sobre el producto o sus beneficios consiguen menos atención.

·      Los titulares que contienen alguna noticia tienen más éxito. Puede ser un lanzamiento, una mejora en el producto o una nueva forma de utilizarlo. Por lo tanto, si tenemos una noticia, no la ocultemos dentro del texto.

·      Ya que la mayoría de la gente sólo lee los títulos, conviene incluir la marca en el titular para que no pase desapercibida.

·      Da buen resultado utilizar en el título una palabra clave que atraiga la atención del target al que nos dirigimos, por ejemplo: asma, más de 30 años, o el lugar de residencia del lector cuando utilizamos diarios zonales. Citando nuevamente a Ogilvy: “Si anuncia matafuegos, empiece por el fuego”.

·      Los datos concretos son más efectivos que las generalidades.

·      Utilice titulares cortos o largos según sus necesidades. No está debidamente probado que unos sean más efectivos que otros. Una docena de palabras es más que suficiente.

·      Es recomendable que el titular incluya un verbo, expresado o elíptico.

·      No desdeñe palabras de eficacia garantizada como AHORA, NUEVO, PRESENTA, etc.

·      Deje hablar a la imagen. El titular no debe reiterar en palabras lo que la imagen ya expresa por sí misma, sino complementar o completar su significado. Si la foto muestra una vaca, no titule al aviso “La vaca”.

·      Los buenos titulares suelen plantear un conflicto. Un hecho insólito, una información incompleta, algo que llame la atención del lector y que éste deba completar pensando…o leyendo el texto.


Si el titular no es suficiente, recurra a un subtítulo

Este recurso tiene una ventaja: como el cuerpo tipográfico es más pequeño que el del título, puede tener mayor extensión que éste, lo cual permite aclarar algunos aspectos que no estén contemplados en el titular.
El subtítulo es el equivalente a la “bajada” de un artículo periodístico. Debe contener una afirmación independiente; es decir, no enlazada o ligada gramaticalmente con el titular. Debe complementar al título.
Un subtítulo entre el titular y el copy aumenta el interés por lo que sigue a continuación y resulta un buen recurso para incluir mayor información.